Rafael Botero

"Todas las opiniones aquí expresadas son tan personales que ni yo mismo me hago responsable de ellas"

lunes, julio 10, 2006

Y SE ACABÓ EL MUNDIAL

Por fin finalizó este encuentro de multitudes y no es que no gustemos del fútbol, vimos unos veinte partidos, sino porque ha sido una carga excesiva de fútbol y no del bueno.

Por estos días recordamos, o nos recuerdan, mundiales pasados y sus historias pero casi nadie, o nadie, ha rescatado que hace veinte años debimos haber estado celebrando el final de un mundial en casa, pero por una actitud mesiánica de un presidente decidió que NO SE PODÍA hacer este evento en un país pobre. Ese dinero debía invertirse en obras públicas y así nos bajaron del pedestal de organizadores de una Copa Mundo. Un lujo que muy pocos se han dado y solo uno, nosotros, hemos despreciado. La historia nos mostró que el país perdió todas las oportunidades de desarrollo asociadas a ese evento y si lo hubiéramos hecho, hoy podríamos estar al nivel de desarrollo de Argentina o México. Pero no, estamos donde estamos porque así es nuestra dirigencia.

Doblemos, una vez más, las campanas que invitan al duelo y no olvidemos jamás que fuimos sede mundialista y nos quitaron ese privilegio.

Volvamos ahora al mundial recién ido. Sin ser conocedores de fútbol - esperamos comprar el CD del profesor Pinto para entender todas las minucias de la táctica- este fue un mundial soso. Pocas gambetas, varios goles hermosos, Italia Campeón, Zidane expulsado pero de resto lo simple y aburrido. Dos o tres buenos partidos y toda la gama posible de repeticiones, rankings y resumenes jamás vistos.

Como nosotros no estuvimos con selección propia entonces nuestra carta era Oscar Julián y desde que estaba preparándose en Villavicencio lo daban como seguro arbitro de la final; pero pitó un partido regulo y los comentaristas hacían entrevistas a cuanto analista arbitral se encontraban para que les dijeran que sí, que el volvería a pitar. Que vergüenza. Lo regresaron en la primera de cambio

Las narraciones radiales y televisivas se colocaron en evidencia al narrar partidos desde un estudio y tener los comentaristas y analistas regados en el resto del mundo -será esto una muestra de la globalización?- tratando de hacernos creer que estaban en directo. Esto dejó en su plata a quienes fueron a transmitir. No nos pueden seguir metiendo mentiras.

Pero si de mentiras se trata el broche de oro fue para la hermosa shakira. No lo pudo hacer peor. Creo que todo el trabajo de años lo puso en riesgo al hacer un OSO MONUMENTAL ya que en su actuación se veía que era un pesimo doblaje y lo único rescatable fue el meneo de sus caderas. Que pena.

Y sí, gracias a Dios se acabó el mundial... pero no olviden que debemos estar en esa cita dentro de cuatro años. Debemos empezar a prepararnos por que si no clasificamos, la vamos a ver negra.